La neuroeducación es un campo interdisciplinario que integra los conocimientos de la neurociencia y la educación con el objetivo de comprender cómo funciona el cerebro durante el proceso de aprendizaje y cómo estos conocimientos pueden ser aplicados para mejorar la enseñanza y el aprendizaje.
Esta disciplina intenta comprender ¿Cómo aprende el cerebro? ¿Qué mecanismos cerebrales están involucrados en el proceso de aprendizaje? ¿Cómo pueden los educadores aprovechar estos conocimientos para optimizar la enseñanza y el rendimiento académico de los estudiantes?
Este enfoque de corte integrador, ha promovido avances en la educación, como: la identificación de estrategias más efectivas, la comprensión de las diferencias individuales en el aprendizaje y la aplicación de métodos de enseñanza adaptados a las necesidades específicas mentales de las tipologías de estudiantes.
Algunos de los temas prioritarios de la neuroeducación, son: el papel de la memoria en el aprendizaje, los efectos del estrés en el cerebro y en el desempeño académico, la importancia y funcionamiento de la plasticidad cerebral y el impacto de las emociones en el aprendizaje.
A continuación, veremos diez premisas que le ayudarán a comprender más sobre la aplicación directa de la neuroeducación:
1. El miedo y el estrés crónico bloquean los mecanismos cerebrales del aprendizaje.
2. La curiosidad, la atención y la sorpresa son puertas del aprendizaje eficiente.
3. El juego es un facilitador del aprendizaje. Si nos sentimos bien aprendiendo, desearemos aprender más.
4. La actividad física mejora el rendimiento cognitivo, las funciones ejecutivas y facilita el aprendizaje.
5. Contar historias facilita el aprendizaje y la asimilación de conceptos, ya que activa el llamado cerebro social.
6. Fomentar la imaginación con cualquier actividad (teatro, dibujo, etc.) optimiza el funcionamiento neuronal.
7. Respetar las horas de sueño en los adolescentes (que necesitan dormir más) ha demostrado ser beneficioso.
8. El trato personalizado para los alumnos y respetar su ritmo de aprendizaje es necesario, porque cada cerebro es único y no a todos los alumnos les ocurre lo mismo en el mismo momento.
9. El trabajo en equipo que implica compartir, dialogar, negociar y colaborar, facilita el aprendizaje porque nuestro cerebro es social.
10. Es necesario ayudar a los alumnos a ejercitar las funciones ejecutivas, como analizar, planificar, tomar decisiones razonades y gestionar las emociones y será de gran ayuda para su adaptación a la academia y a la vida. Siempre guiándolos en función de su edad.
La resistencia a estudiar es un problema común que muchos estudiantes enfrentan cada día. Puede ser causada por una variedad de factores, como la falta de motivación, la procrastinación, la ansiedad, el aburrimiento, el estrés familiar o el desfase que existe entre la libertad y la velocidad de las redes sociales y de la internet, en comparación con la lentitud relativa de los estudios formales de escuelas, liceos y universidades.
Para vencer esta resistencia a estudiar, podemos acudir a ciertas estrategias útiles para facilitar y estimular el aprendizaje que conduce a un aprendizaje debidamente estructurado y a un mejor rendimiento académico.
Establecer metas: Es importante tener metas claras y realistas para el estudio. Esto puede ayudar a mantener la motivación y enfocar el tiempo y la energía en las tareas de estudio más importantes. Las metas deben ser específicas, medibles y alcanzables. Y se debe comenzar por metas pequeñas alcanzables para aumentar la motivación con el apoyo de los primeros logros.
Planificar el tiempo: Una buena planificación del tiempo puede ayudar a evitar la procrastinación y la ansiedad. Es recomendable establecer un horario de estudio, que incluya tiempo para descansar y hacer actividades recreativas. Es importante ser realistas sobre el tiempo que se necesita para completar las tareas de estudio, y tener en cuenta las prioridades y compromisos personales.
Encontrar un lugar adecuado: Un lugar tranquilo y cómodo para estudiar puede ayudar a crear un ambiente propicio para el aprendizaje. Es importante elegir un lugar sin distracciones, donde se pueda concentrar y mantener el enfoque en la tarea de estudio.
Usar técnicas de estudio: Las técnicas de estudio pueden ayudar a mejorar la comprensión y retención del material de estudio. Algunas técnicas incluyen la toma de notas, la elaboración de resúmenes, la realización de ejercicios prácticos y la revisión periódica del material.
Buscar apoyo: Es importante buscar apoyo de amigos, familiares o profesionales si se enfrenta a problemas emocionales o de aprendizaje que dificultan el estudio. Los tutores, mentores o consejeros pueden proporcionar orientación y recursos útiles para superar la resistencia a estudiar.
Aumentar la motivación: Lo primero es la motivación, el deseo, las ganas, la determinación. De allí parte todo. Para eso debemos pensar en los beneficios o ganancias de estudiar la celebración de los pequeños logros, la búsqueda de inspiración de modelos a seguir, o la creación de un ambiente de estudio positivo y motivador.
De modo que la resistencia al estudio, puede ser superada a través de la implementación de estrategias efectivas como establecer metas, planificar el tiempo, encontrar un lugar adecuado para el estudio, utilizar técnicas de estudio efectivas, buscar apoyo, y encontrar la motivación. Con el tiempo y la práctica, estas estrategias pueden ayudar a mejorar el rendimiento académico y a desarrollar habilidades valiosas para el éxito futuro.